Nuestro principal objetivo es crear núcleos maternales y hogareños con no más de 3 o 4 niños por educadora que respondan a las verdaderas necesidades de cuidado y atención del niño menor de 3 años.
Promover y desarrollar en nuestro entorno social y cultural la profesión de madre de día.
Defender el derecho del niño a permanecer en un hogar al menos durante los 3 primeros años de vida.
Ofrecer espacios tranquilos para el juego libre con estímulos auténticos y naturales que permitan al niño participar en experiencias significativas y ser protagonista de su propio desarrollo.
Ofrecer a las familias una alternativa a la guardería o escuela infantil para responder a la cuestión de conciliación laboral y familiar.
Ayudar a los adultos que forman el entorno del niño a crear por sí mismos las condiciones necesarias y saludables para el desarrollo integral del niño.
Fomentar el conocimiento del niño pequeño a partir de la antroposofía y del acercamiento a otras disciplinas científicas actuales que se ocupan del estudio del ser humano.
Ampliar las posibilidades de puestos de trabajo fundamentalmente para la mujer en su propio hogar. La actualización del servicio no exige grandes inversiones y podría conseguirse en un tiempo corto en función de cada situación.
Utilizar espacios de atención a la primera infancia en estructuras ya creadas (el propio hogar de la madre de día) evitando así nuevos costes a las entidades públicas para este fin. Lo que supondría un número importante de nuevas plazas de atención al menor.
Ofrecer un espacio de apoyo, asesoramiento e intercambio social a los padres de los niños atendidos.
Sensibilizar a la opinión pública sobre las necesidades del niño pequeño.